viernes, 16 de enero de 2009

32. Cielo azul

Hace unos cinco años que vivo en Ciudad Colón. Desde entonces me he dado cuenta de que nuestro clima es algo impresionante. Mientras en San José hace frío, llueve, hay neblina, o está muy nublado, sale uno del Alto de las Palomas y pasa el cruce de Piedades de Santa Ana y los de Brasil de Mora, y listo, clima nuevo, cielo azul, mucho calor y en días como estos, vientos frescos que hacen agradable tanto sol.

Pues esta semana el cielo azul de Ciudad Colón se me vino encima. Ha sido una semana impresionante en la que me he sentido muy bien.

En la aplicación de la quimioterapia, con excepción del tercer día (miércoles) en que me punzaron tantas veces que a la sexta perdí la cuenta, ya que mis venas optaron por hacer mutis por el foro y desaparecieron del espectáculo, los efectos han sido muy benévolos.

Ese día tuve un poco de náuseas, pero con la Pliticam de rigor, se me calmaron. Ayer tuve un día hermoso en el que ni siquiera tomé ningún medicamento, solo un poco de fatiga, que atendí con una siesta luego del almuerzo y listo.

Hoy nuevamente me he levantado muy bien, sin náuseas ni mareos. Además como he aprendido de las anteriores aplicaciones, he cuidado de ingerir los remedios apropiados que me han librado del estreñimiento, efecto que aunque ha querido afectarme, no ha podido, gracias sobre todo a las ciruelas (remojadas en jugo de uvas), la linaza y las frutas.

Además los helados de palillo de Eli, han sido una verdadera bendición, porque cada vez que siento esa sensación espantosa en la boca, como metálica, que me produce tanta salivación, me como un heladito (los de cas son un 100) y con eso se me quita. Esto además me ha permitido tomar bastante agua sin que me den náuseas, con lo que creo que estoy limpiando el cuerpo más rápido que en otras ocasiones.

La verdad me siento bien y agradecido por tan buen resultado. Ya solo me queda un ciclo en febrero. En los próximos días me hacen nuevamente exámenes de rastreo, para verificar los resultados de la quimioterapia, así que ahí les cuento.

3 comentarios:

ana ele dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ana ele dijo...

Hola Rolo, querido amigo.
Vieras que nostalgia me dió con eso del helado de palito, y más de cas.
Por muchos años tuvimos un palo de cas en el patio de la casa (de mis papás... ah tiempos!) Y claro, a menudo nos recetaban el frequisto de cas, y los helados, deliciosos, no importa si eran en agua, en leche (evaporada, aun mejor), de palito o de vasito...
Pero diay, aquí no hay cases.
Estos últimos días he extrañado más Tiquicia, a los amigos y la familia. Quizás por los temblores que nos asustaron tanto, o porque, luego de ocho meses, mi mamita está por regresarse (aunque ahora se queda my fa, osea, mi papá unos mesesillos)... Mira lo que hace un nieto!!!
Además de nostalgia, me has provocado gran alegría al saber que estás tan bien. Admiro tu fortaleza y tu entrega, y espero que la tormenta pase pronto.
Un fuerte abrazo, además, como dice mi marido, este es el año, la crisis, cualquiera que sea, es solo un reto, y este 2009 va a ser maravilloso! ya verás...

Un fuerte abrazo, desde el DF, Ana Laura

*°·.¸¸.° Heidy °·.¸¸.°* dijo...

Yupiiii, me alegra mucho que te sientas tan bien!

Siempre sale el sol, así que disfrútalo.
Y aunque aca en Moravia, está oscuro, hace frio y mucho viento, para mi, hay mucho sol.

Me antojaste de comer helados de palito.

Un abrazo